La música es algo que puede beneficiar a cualquier ser vivo de este planeta: a nosotros, nos ayuda contra la depresión, a los animales, les tranquiliza, y a las plantas las ayuda a crecer ¿no es maravillosa?
¡Pues con los niños ocurren miles de maravillas más! Introducir a nuestros hijos en la música, enseñarles a expresar sus emociones mediante bailes y melodías y demás, supondrá sin duda un sinfín de beneficios que debemos ofrecerles sin duda alguna.
Aun así, podemos entender que introducir a nuestro hijo en el aprendizaje del canto o de algún instrumento puede ser difícil. Por ello, en este artículo vamos a destacar una vez más las ventajas de enseñar música a nuestros hijos, y vamos a aprender paso a paso cómo debemos tomar la decisión de ayudar a nuestros hijos a iniciarse en este hermoso arte.
¡Empezamos!
¿De qué beneficios disfruta nuestro hijo si le introducimos en la música?
- Desarrollo cognitivo.
La práctica musical estimula áreas del cerebro relacionadas con la memoria, la atención y la resolución de problemas, lo cual contribuye al desarrollo cognitivo de los niños.
De hecho, diferentes estudios que los niños que aprenden música tienen un mejor rendimiento en pruebas de coeficiente intelectual y habilidades matemáticas.
- Mejora del rendimiento académico.
Asimismo, la disciplina y la concentración necesarias que obtiene un menor para aprender música acaban influyendo en otros sectores académicos, mejorando así su rendimiento escolar en general. Además, la música puede ayudar a mejorar la comprensión lectora y las habilidades en matemáticas, ya que implica conceptos como ritmo, patrones y estructura.
- Fomento de la autoexpresión.
La música ofrece a los niños una forma única de expresar sus emociones y pensamientos. Tocar un instrumento o componer música les brinda una salida creativa para expresarse, lo que les ayuda a desarrollar su identidad y confianza en sí mismos.
- Desarrollo de habilidades sociales.
Participar en actividades musicales, ya sea en solitario o en grupo, fomenta el trabajo en equipo, la cooperación y la empatía. De esta forma, los niños aprenderán a escuchar a los demás, a comprometerse y a apoyarse mutuamente entre ellos, mejorando así las habilidades sociales de quien la práctica.
- Fomento de la creatividad.
La música estimula la imaginación y la creatividad de los niños al permitirles explorar diferentes sonidos, melodías y ritmos. Les enseña a pensar de manera diferente y a buscar soluciones creativas a los problemas, habilidades que son valiosas en todos los aspectos de la vida.
- Promoción del desarrollo motor.
Tocar un instrumento requiere coordinación y control de los movimientos, por lo que sus habilidades motoras se desarrollarán mejor al aprender música. Además, actividades como el baile o la percusión pueden mejorar la coordinación corporal y el equilibrio.
Cómo introducir a tu hijo en el mundo de la música paso a paso.
Introducir a tu hijo en el mundo de la música puede ser una bonita y gratificante experiencia, tanto para él como para ti, pero no olvides ir paso a paso:
- Paso 1: fomenta la exposición temprana a la música.
Desde antes del nacimiento, puedes exponer a tu hijo a la música:
Durante el embarazo, escucha música suave y relajante, ya que se ha demostrado que los bebés responden a los sonidos en el útero. Cuando nazca, sigue reproduciendo música en casa, mientras paseáis en coche o mientras jugáis.
- Paso 2: crea un entorno musical en casa.
Llena tu casa con instrumentos musicales simples y juguetes sonoros adecuados para la edad de tu hijo. Pueden ser tambores, maracas, xilófonos o incluso juguetes que reproduzcan música. De esta forma, el niño sentirá curiosidad por aprender música ¡no lo olvides!
- Paso 3: ofrécele oportunidades para experimentar.
Permite que tu hijo experimente con diferentes instrumentos y sonidos; si tienes instrumentos musicales en casa, anímale a tocarlos y a descubrir cómo producen sonidos. Si no tienes instrumentos, improvisa con objetos cotidianos, como cacerolas y cucharas, para crear ritmos y melodías.
- Paso 4: involúcrate en actividades musicales.
Busca clases de música para niños en tu comunidad u online. Estas clases suelen incluir actividades divertidas y participativas, como cantar, bailar, tocar instrumentos y juegos musicales. También puedes considerar la posibilidad de llevar a tu hijo a conciertos o espectáculos musicales para niños, donde puedan disfrutar de la música en directo.
- Paso 5: proporciona la oportunidad de aprender un instrumento.
Cuando tu hijo esté listo, considera la posibilidad de inscribirlo en clases de música para aprender a tocar un instrumento tal y como recomiendan los trabajadores de Liceu de Música Ciutat de Mislata. Puedes comenzar con instrumentos simples y adecuados para su edad, como la flauta, el teclado o la guitarra. A medida que tu hijo avance y desarrolle habilidades musicales, puedes explorar la posibilidad de aprender otros instrumentos más avanzados, pero cerciórate siempre de que haya un progreso, sino tu hijo se abrumará y sentirá rechazo.
- Paso 6: fomenta la práctica diaria.
Anima a tu hijo a practicar con su instrumento y a dedicar tiempo a explorar la música de forma independiente. Establece un horario que sea adecuado para su edad y nivel de habilidad y premia sus esfuerzos y logros musicales ¡siempre!
La práctica es muy importante para mejorar las habilidades musicales, pero no satures a tu hijo; con una hora al día, por ejemplo, irá en buen camino.
- Paso 7: explora diferentes géneros y estilos musicales.
Por último, expón a tu hijo a una variedad de géneros y estilos musicales (clásico, jazz, pop, rock, rap, etc.) Escuchad juntos diferentes artistas y géneros, y hablad sobre lo que os gusta y por qué.
Recuerda que tu hijo tiene una personalidad única y sentirá atracción por un género que quizá no esperabas ¡pero esto no significa que esté mal! Debemos respetarle y apoyarle en todo momento para que no se sienta frustrado.
