Estos últimos años han sido un no parar. Desde que tuve a mi primer hijo y ahora, recién nacido el segundo casi no encuentro el momento de relajarme. Siendo consciente de lo importante que es tener algo de tiempo para desconectar he empezado a contratar los servicios de una niñera. Así puedo aprovechar para hacer algo de ejercicio y, siempre que puedo, acudo a Evasiom Spa para hacerme masajes para eliminar algunas contracturas que se me han ido acumulando debido al estrés. La niñera me ha comentado un detalle del cual, probablemente por mi nivel de agotamiento no me había percatado, y es que, al parecer, mi hija mayor manifiesta bastantes celos de su hermano pequeño.